Jamie Dornan charla sobre su vida sexual en una sincera conversación
Los Ángeles. “
No me puedo creer que esté hablando sobre nuestra vida sexual”, decía Jamie Dornan entre risas en un momento durante nuestra reciente conversación. “
Es como ir a terapia”, bromeó en otro momento. Fue muy sincero, y se le veía relajado y de buen humor, echándose a reír de forma juvenil y espontánea en varios momentos.
El actor británico lucía una americana de
Neil Barrett, unos pantalones de
Everlane y unos zapatos de
Salvatore Ferragamo. “Son un número 9" (
nota de la traductora: algo así como un 43-44 en España) comenta jocoso. También llevaba una espesa barba, lo cual nos llevó a la gran pregunta: ¿A su mujer, la actriz y cantante Amelia Warner, le gusta que lleve barba?
“
Deberíamos llamarla y preguntarle”, dice él mientras se le iluminan los ojos. “
Cuando me mandaron el guión de Cincuenta Sombras Más Oscuras, que arranca cuatro o cinco días después del final de Cincuenta Sombras de Grey, llevaba una barba de pocos días. Fue como '¡Genial!' (se ríe),
porque odio afeitarme más que cualquier otra cosa en el mundo. Es un aburrimiento. Creo que mi mujer me prefiere con barba. Empiezo a rodar una película pronto, y ellos me querían con la barba, y es por ello por lo que la llevo tan crecida”.
Dos películas.Cuando se le pregunta por la reacción a las informaciones que afirmaban que había sido despedido de las dos siguientes películas de la trilogía, aunque ambas películas ya han sido rodadas, Jamie vuelve a bromear, “
Iré a comprobarlo”. Añade, “
Dakota y yo estamos obligados por contrato a rodar las tres películas, y hemos rodado la segunda y la tercera de forma consecutiva, así que ya hemos terminado el rodaje”.
Entre sorbos de café y agua embotellada, Jamie habla sobre
The Fall, la serie de televisión donde interpreta a Paul Spector, un asesino en serie; Dakota Johnson y las dos siguientes entregas de
Cincuenta Sombras, donde repite en su papel de
Christian Grey;
El Asedio de Jadotville, donde da vida al comandante irlandés
Pat Quinlan a principios de los 60 en
Congo; su vida con Amelia y sus dos hijas en una casa de campo en
Somerset, en el suroeste de
Inglaterra.
“
Estoy impresionado conmigo mismo por la forma en la que estoy aquí sentado”, comenta mientras se acomoda en una oficina en
West Hollywood. “
Me pongo muy nervioso. Normalmente estoy que me subo por las paredes”.
¿Cómo te has quitado de encima tu papel como un asesino en serie en The Fall? ¿Qué impacto ha tenido en tu vida sexual dar vida a un tío que es sadomasoquista?
En lo que respecta al sadomasoquismo, a mi mujer eso no le va en absoluto. Evidentemente, hay un gran mercado ahí fuera en ese sentido, pero no me interesa nada de nada, así que no creo que haya tenido influencia alguna en nuestra vida sexual. ¡No me puedo creer que esté hablando aquí sobre eso! (ríe)Respondiendo a la primera parte de tu pregunta, realmente siento algo así con respecto a Paul Spector, porque han sido cuatro años y medio y ahora ya todo ha terminado. Por muy raro que suene, me ha encantado darle vida y meterme en la piel de alguien tan espantoso. Que la serie haya acabado es agridulce, porque ahora siento que le conozco tan bien… Hay partes de él a las que les he cogido cariño, y es difícil quitarse eso de encima. He tenido suerte con The Fall, porque la rodamos en Belfast, donde yo nací aunque ya no vivo allí. Estuvo bien poder volver a casa, estar a lo mío y prepararme para las cosas espantosas que tenía que hacer al día siguiente. Fue verdaderamente algo difícil y complicado para mí, ya sabes, eso de dar vida a alguien tan opuesto a mí. Pero realmente lo he disfrutado.Me siento un poco despojado ahora que ha terminado porque, como me dijo mi mujer el otro día, “Los personajes complejos como éste algunas veces sólo aparecen una vez a lo largo de una carrera. No surgen oportunidades así muy a menudo”. Tengo suerte de haber podido interpretar a un personaje así”.
Estás dejando huella con dos papeles: un sadomasoquista y un asesino en serie. Cuando llevas a tus hijas a jugar, ¿qué reacción tienen los padres ante ti?
¿Verán alguna vez mis hijas algo de lo que yo hago? (dice entre risas) No. Para serte sincero, vivimos en el campo, en la zona rural de Inglaterra, así que lo de ir a jugar es como gente que me conoce, tanto a mí personalmente como mi trabajo. Así que nunca me he visto en esa situación todavía. Nuestra hija mayor acaba de empezar la guardería. La llevo y la recojo, y a veces me miran un poco raro, pero nunca sabes bien de qué te conoce la gente. En Londres todo eso sería más agobiante, pero nosotros hemos elegido llevar una vida tranquila. Abrimos la puerta de casa y sólo vemos ovejas y corderos.
¿Cómo ha cambiado tu vida el éxito de Cincuenta Sombras?
Mucha más gente me conoce, y eso te abre las puertas en esta industria. Tengo que decir la verdad: si haces una película que recauda más de 600 millones de dólares en todo el mundo, consigues papeles en películas como “El Asedio de Jadotville” o “Anthropoid”. No habría podido participar en proyectos de los que me moría por formar parte si no hubiera sido parte de una película tan exitosa.¿Y qué pasa con la atención de los fans?
Después de Cincuenta Sombras las cosas fundamentales de mi vida no cambiaron. Pero es lo de siempre: vivimos en medio de la nada. Entro en pánico si son las nueve y media de la noche y no estoy dormido, porque las niñas se despiertan a las cinco y media. Llevamos una vida muy tranquila. No obstante, hay situaciones particulares, como cuando estoy en Los Ángeles. Aquí tengo que salir a cenar a sitios donde hay muchísimos paparazzis, y son unos pu**s ansiosos. Así que en noches así, donde me enfrento a todo eso, me siento una persona un poco diferente, pero bueno, son solamente unas diez noches al año. El resto del tiempo sólo veo ovejas.
¿Hay algo que todavía te sorprenda?
No me importa todo el tema de estar desnudo en la película. No me educaron en un ambiente puritano (ríe). No estoy queriendo decir que mis padres se pasearan desnudos por casa ni mucho menos, pero vengo de un ambiente bastante liberal. Es solamente un trabajo.
¿Desde qué punto de vista miras a esos hombres a los que das vida, yendo desde The Fall a El Asedio de Jadotville, que están en polos opuestos en términos morales?
Cada personaje debe afrontarse como si empezases de cero. Todavía no he dado vida a una mujer, aún no soy Eddie Redmayne , ¡pero dadme tiempo, llegaré a ese punto! (dice entre risas)
¿Cómo fue el rodaje de Cincuenta Sombras Liberadas en Francia?
No nos centramos mucho en París, ya que ellos (Christian y Anastasia) también van al sur de Francia. Estábamos en el maldito Niza cuando sucedió el atentado, y fue espantoso. También fue muy raro porque me alojé en la misma habitación de hotel en la que estuve cuando rodé María Antonieta, mi primer trabajo hace 12 años. Me llevaron a la habitación y todo estaba igual. Fue raro. Así que sí, aunque parezca que mi carrera va avanzando, en realidad todo sigue igual. Después rodamos en la Opera Garnier junto al hotel, donde también rodé mi primera escena en María Antonieta.
¿Nos puedes contar qué impacto ha tenido James Foley, el director de las dos nuevas entregas, y cómo ese cambio os ha afectado a Dakota y a ti?
Dakota y yo somos íntimos amigos de Sam Taylor-Johnson. He quedado con ella esta noche. Así que tener a alguien nuevo al mando podía ser contraproducente para Dakota y para mí. Ya habíamos hecho una película, así que teníamos más voto sobre las dos siguientes. Estábamos en una posición de algo más de autoridad, pero así y todo necesitábamos a alguien para manejar el barco, y Jimmy Foley lo hizo constantemente. Tenía truco para él también, puesto que llegaba a un barco que ya estaba navegando, un proyecto ya en marcha, y la primera parte ha tenido muchísimo éxito. Aún así, él quería dejar su propio sello, y todo ha salido muy bien.
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El cambio de director (de Sam Taylor-Johnson a James Foley), es todo un cambio, pero lo hemos pasado muy bien", dice Jamie Dornan sobre el nuevo director de las siguientes entregas de la trilogía de
Cincuenta Sombras, protagonizada por él y Dakota Johnson.
Tienes que ver reacciones muy interesantes cuando los espectadores de
The Fall te ven. ¿Puedes explicarnos en qué sentido este personaje ha sido un reto más grande que
Christian Grey para ti?
Sí, tengo que andarme con ojo para evitar situaciones en las que ande por ahí de estrangis por la noche. Eso seguramente le cuadraría bastante a la gente… Es algo raro lo que sucede con Paul Spector en The Fall. Nunca antes había tenido la ocasión de interpretar a un personaje tan complejo, profundo, oscuro, retorcido y psicópata. Imagino que por mi pasado como modelo, me veía empujado hacia papeles más en plan “el novio de”, lo cual está bien, pero si te conformas con seguir por ese camino terminas no siendo capaz de mostrar una faceta diferente de ti como actor. Me encanta la televisión porque te da margen para profundizar en el personaje. Es divertido, porque con cualquier otro papel vas intentando encontrar algo de ti en dicho personaje, lo cual es bastante difícil de hacer cuando das vida a alguien tan cruel como Spector. The Fall ha cambiado por completo el rumbo que estaba tomando mi carrera.
Eres un hombre familiar. A lo mejor es eso lo único que tienes en común con Paul Spector.
Sí, tienes razón. En medio de toda esta locura de The Fall y Cincuenta Sombras durante los últimos cuatro años, he formado una familia también. Y toda esa locura de ver mi carrera tomar un rumbo concreto ha coincidido con tener dos niñas de menos de 3 años. Es una locura maravillosa. Cuando rodé la primera temporada de The Fall todavía no era padre, por lo que te imaginas cómo es ese amor que sientes al ser padre, pero no lo sabes bien hasta que no lo vives en primera persona.
Vienes de una familia de médicos muy prestigiosos.
Sí, ¿cómo es que soy actor? No habría podido ser médico. No soy lo suficientemente inteligente, y Biología era la asignatura que peor se me daba. Los únicos sobresalientes que saqué en el colegio fueron en las clases de teatro si te digo la verdad.He tenido suerte porque en mi familia nadie nos presionó ni a mí ni a mis hermanas para que nos dedicásemos a la medicina. No me interesa. Tiene gracia, cuando mi padre acabó el instituto le ofrecieron un puesto en RADA (Royal Academy of Dramatic Art). Es ginecólogo, pero podría haber sido actor.
¿Con qué papel te sientes más cómodo, siendo un sex-symbol o llevando armas? ¿Siendo un amante o un guerrero?
Joder… Todos los niños crecen jugando con armas hasta cierto punto. Yo estoy totalmente en contra del uso de armas, pero son necesarias para contar la historia en El Asedio de Jadotville. No puedes ir cargado de palos cuando intentas contrarrestar el poder de 3000 mercenarios. Hay algo de todo eso que encontré liberador, divertido y estimulante. Sentía que tenía menos presión para ponerme en plan machito, porque el arma ya hace todo eso por ti. Pero no puedes ocultar nada cuando tratas de convertirte en un objeto de deseo como en Cincuenta Sombras. Estás más al descubierto.
¿Qué te han enseñado tus hermanas sobre las mujeres?
Es una ventaja tener dos hermanas mayores. Los chicos que tienen hermanas sienten un mayor respeto por las mujeres. Como era el pequeño, solían ponerme pelucas y pintarme los labios, lo cual creo que es bueno desde un lado de vista saludable, ya que ahora entiendo mi lado femenino. Todos los hombres tienen un lado femenino, y creo que la mayoría de los hombres se avergüenzan de admitirlo, lo que es un problema. Es raro que los hombres no muestren sus sentimientos lo suficiente. En Irlanda es algo muy común, lo que me ha hecho muy sensible al respecto. Pero mis hermanas también me han enseñado cosas más prácticas, como que si quieres besar a una chica tienes que saber hacerlo. No me refiero al beso como tal, pero sí que recuerdo que me decían que debía preguntar, “¿Puedo besarte?”.
¿Qué ha aportado eso a tu matrimonio?
Crecí en una casa y una familia llena de chicas, y todavía sigue siendo igual. Es una locura, pero me encanta. Y de forma extraña, casi no sé cómo me manejaría con un niño si lo tuviéramos. Cuando has tenido dos niñas es todo lo que conoces.¿Te resistes a que se refieran a ti como un tío guapo?
Hombre, te pueden llamar cosas peores (ríe)… Pero sí que hay una parte de mí que quiere que se me reconozca por otra cosa que no sea mi físico. En un proyecto como The Fall me meto jodidamente de lleno. Entro en la mente de una persona horrible de forma muy profunda. A veces te cuesta sangre, sudor y lágrimas. Pero la gente sólo habla de si un asesino en serie puede ser guapo o no. Y tú te pones en plan “Me cago en la pu**”. Nunca me habían dicho que era “mono”. Es un problema que he tenido desde que era pequeño, cuando me sentía como un chaval muy guapo y delgaducho que quería gustar a las amigas de mis hermanas. Quería que no me viesen como esa monada de hermano pequeño que tenían sus amigas. Siempre he hecho deporte y rugby, pero tenía todas las de perder. Llevo toda la vida luchando contra eso, y es por eso por lo que siempre quise tener barba, porque me hacía parecer más hombre. Esto se está convirtiendo casi en una sesión de terapia…¿Con cuánto entusiasmo te preparas físicamente?
No se me da nada bien todo eso. Voy pasando por diferentes fases. Durante las tres temporadas de The Fall tenía que estar sin camiseta mucho tiempo. Paul Spector es un obseso del ejercicio, así que eso ejerce cierta presión sobre ti, y no hablemos de Cincuenta Sombras. Tienes que hacer ejercicio. No es que me apasione, porque lleva mucho tiempo, y yo tengo dos niñas pequeñas, y no quiero alejarme de ellas para estar en el gimnasio levantando pesas. No es divertido. Prefiero mantenerme en forma practicando deporte.
¿Qué deportes practicas?
Crecí jugando al rugby, al tenis, al golf, navegando y esquiando.
Cuando se supo que Cincuenta Sombras de Grey iba a ser llevada a la gran pantalla los detractores dijeron que iba a ser horrible. Y ahora, después de una recaudación de 600 millones de dólares, ¿quién ríe el último?
No me quiero poner a la defensiva. Intento evitar citar a Taylor Swift diciendo eso de “Haters gonna hate” (Taylor Swift- Shake It Off) (bromea). La gente tiene derecho a tener su propia opinion. Recaudó mucho dinero, pero hay mucha gente a la que no le gustó y se opusieron a mi elección, a la de Dakota, a cómo se hizo la película, cómo quedó, qué escenas aparecieron y cuáles no…Es algo subjetivo. Hay un put* montón de gente a las que no les gustó que yo fuera el elegido para dar vida a Christian Grey, pero no pasa nada. Nadie habría conseguido que todo el mundo estuviera contento. Me consuela pensar eso.En relación a la primera película, me eligieron cinco semanas antes de empezar a rodar. Eso fue una puta locura, y no creo que sea la mejor forma de meterte en ningún proyecto. Estaba Charlie Hunnam (que había sido elegido para interpretar a Christian Grey, pero dejó el proyecto por problemas con su calendario), y se formó un gran barullo.La gente estaba más tranquila con la segunda y la tercera. Te tranquiliza mucho el hecho de que la primera película fue un éxito, así que sentimos menos presión.Dakota y yo llevamos todo eso bien juntos. Solamente yo sé por lo que está pasando, y solamente ella sabe por lo que estoy pasando yo. Estoy agradecido por eso, nos respetamos el uno al otro y somos grandes amigos.